Generación Z: hacia el marketing visual y ético
Por Romina Schiaffino*
Aunque mis amigos bromeen diciendo que me comporto como toda una millennial, soy generación X. Igualmente, esa letra representó la incógnita con que se toparon la mayoría de las compañías al momento de enfrentar a sus clientes millennials (generación Y). Y ahora, quienes marcan el ritmo del mercado son los llamados centennials, conocidos como generación Z.
Si bien no hay acuerdo en los límites exactos de edad de quienes la componen, podríamos convenir en que son individuos nacidos entre mediados de los 90 y principios del nuevo milenio. Aún no tienen gran poder de compra, pero claramente serán los próximos en poseerlo.
Se los define como autodidactas, completamente tecnológicos y conceptuales. Sus profesores se quejan de que “no leen” … Creo que leen diferente: son más prácticos y creativos, y valoran la comunicación sencilla, breve y mayormente visual. Las marcas tienen que aprender a comunicarse de esta manera, casi icónica, con menos texto y sin perder de vista la regla del “20-80”: 20% de texto - 80% de imagen.
A los centennials también se los acusa de ser multipantalla y adictos a la tecnología, ya que son la primera generación 100% nativa digital. Además, muchos definen a la generación Z como hedonista y compleja. Es cierto que hay muy poco tiempo para captar su atención (cercano a los ocho segundos), pero considero que lo que exigen es más transparencia en las acciones de la marca, así como en el desarrollo de un marketing ético.
Crecieron viendo YouTube y consultando tutoriales para hacer cosas por ellos mismos. Dentro del aula, exigen experimentar y conocer ejemplos concretos, alejados de la clase magistral cargada de teoría repetitiva o inaplicable a la realidad (concuerdo completamente).
Por otra parte, reclaman más experiencias y menos promesas. En este sentido, Michael Abbott, experto en Servicios Financieros de Accenture, afirma: “Demandan una excepcional experiencia digital en todas las plataformas, especialmente en sus móviles, y quieren recompensas personalizadas, con ofertas y descuentos”.
Buscan que las marcas aporten valor, puesto que son una generación más solidaria y muy consciente desde el punto de vista ecológico; aquellas marcas que adopten acciones de comercio justo y campañas que otorguen apoyo social, tendrán muchas más chances de ganarse su corazón (y su bolsillo). A mi entender, la generación Z nos presenta un desafío maravilloso.
* Licenciada en Marketing y docente de Marketing Digital en la carrera de Diseño y Desarrollo Web
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