Pixar y sus 22 reglas para narrar

Desde Kurt Vonnegut hasta Ernest Hemingway, los grandes artistas han compartido sus ideas para construir una sólida escritura narrativa. Emma Coats, exempleada de Pixar, no se quiso quedar afuera: en el pasado junio, y mediante su cuenta de Twitter, compartió las 22 Reglas de la Buena Narración, las cuales fueron ganando terreno en la web.

Si bien Disney o Dreamworks tienen sus propias fórmulas, estas recomendaciones son importantes a la hora de pensar en una historia que sea interesante, tenga la dinámica necesaria y atrape de principio a fin al espectador.

1 - La admiración hacia un personaje es más por sus intentos que por sus éxitos.

2 - Hay que pensar qué interesa como público, no como guionista.

3 - Es importante buscar un tema… pero no vas a saber de qué trata la historia hasta llegar al final. ¡A reescribir!

4 - Había una vez ___. Todos los días, ___. Un día, ___. Debido a eso, ___. Y por eso, ___. Hasta que ___.

5 - Simplificá y concentrate; combiná personajes; tomá los desvíos… Te vas a sentir como si perdieras cosas valiosas, pero te va a liberar.

6 - ¿En qué es bueno tu personaje? ¿Con qué se siente cómodo? Ponelo adelante de su opuesto exacto. ¿Cómo reaccionan?

7 - Pensá en el final antes que en el nudo. Los finales son difíciles, así que esto va en serio.

8 - Terminá tu historia y dejala ir aunque no sea perfecta. ¡Hacelo mejor la próxima vez!

9 - Cuando te estanques, hacé una lista de lo que NO VA A PASAR a continuación. Eso hará que aparezca el material para sacarte de ahí.

10 - Dejá de lado las historias que te gusten. Lo que te gusta de ellas es parte de vos, por lo que tenés que reconocerlo antes de usarlas.

11 - Trasladá las ideas al papel para poder arreglarlas. Si quedan en tu mente, no las podrás compartir con nadie.

12 - Descartá la primera cosa que te venga a la mente… y la segunda, tercera, cuarta, quinta… Dejá afuera lo obvio. ¡Sorprendete!

13 - ¡Dale opiniones a tus personajes! Las figuras pasivas o maleables son “veneno” para el público.

14 - Si fueras tu personaje en determinada situación, ¿cómo te sentirías? La honestidad hace que hasta las situaciones más increíbles sean verosímiles.

15 - ¿Cuáles son las posibilidades y riesgos del personaje? ¿Qué pasará si no triunfa? Brindá razones para alentar por él o ella.

16 - Ningún trabajo es inútil: si no funciona, seguí con otra cosa, porque es probable que sea útil después.

17 - Conocé la diferencia entre hacer lo mejor y preocuparse excesivamente: escribir una historia es probar, no refinar.

18 - Las coincidencias son geniales para meter a los personajes en problemas, pero es trampa si se las usa para sacarlos de ellos.

19 - Tomá los “bloques” de una película que no te gusta: ¿cómo harías para transformarlos en algo que SÍ te guste?

20 - Identificate con tus personajes y situaciones. No podés simplemente escribir “está bien”. ¿Qué te haría actuar de ese modo?

21 - ¿Cuál es la esencia de tu historia? ¿Y el modo más austero de contarla? Si lo sabés, ya podés construir desde ahí.

22 - Finalmente, ¿por qué tenés que contar esta historia en particular? ¿Cuál es la creencia que late dentro de vos y que alimenta a la trama? Se trata del corazón de todo.

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